Alemania terrorista

Cada país es soberano para decidir la postura que adopta ante un conflicto internacional. Las guerras, siendo una desgracia en sí, se justifican o no dependiendo del argumento sostenido en cada ocasión. La de Irak contó con detractores y defensores casi a partes iguales y entre los primeros se encontraba Alemania. Tanto los germanos como sus vecinos los franceses prefirieron no frenar al asesino Sadam y tratar de convertirse en contrapoder de EEUU.

Caído Sadam, son sus amigos terroristas los que se dedican a sembrar el horror en el país asiático. A pesar de la llegada de la democracia, los atentados y los secuestros siguen estando a la orden del día. Susanne Osthoff es una arqueóloga alemana secuestrada y posteriormente liberada en tierras iraquíes. Lo que podría haber sido un episodio amargo para Osthoff ha servido para desenmascarar a esta complice de terroristas y lo que es peor, al gobierno alemán.

Susanne Osthoff, ladrona y terrorista alemana, cuenta con la complicidad del silencio del gobierno de su país. Un país que paga rescates que se destinarán a la comisión de futuros atentados. La exquisitez ética en la argumentación para no entrar en la guerra de Irak parece no encontrar continuidad a la hora de colaborar con los terroristas, así se las gastan algunos políticos. Desde entonces, es posible que este atentado o quizá este otro hayan sido posibles gracias a la generosidad de Alemania, la Alemania terrorista.

3 comentarios:

rojobilbao dijo...

El primer link parece no funcionar.

Luis de Amézaga dijo...

Solucionado, gracias.

Anónimo dijo...

Hombre, puede ser que los del Baas estén gastando aún el arsenal que les vendió EE.UU. y la UE en tiempos de Sadam, que no fue poco, y que lo de este rescate lo usen para comprar Marlboro.